2.1. Definiciones
A lo largo de este apartado, queremos definir algunos conceptos clave de la asignatura. Los habéis podido ver también en la asignatura Taller de programación e interacción, por lo tanto, si queréis ampliar algunas de las explicaciones que daremos, podéis acceder al cuaderno de la asignatura.
Empezaremos recordando algunas definiciones básicas basándonos en Lars-Erik Janlert y Erik Stolterman. Concretamente, en su artículo «The Meaning of Interactivity—Some Proposals for Definitions and Measures» y también en su libro Things that keep us busy, que profundiza y amplía los planteamientos del artículo.
En primer lugar, la interacción es un término que viene de la sociología y que de forma amplia se entiende como las acciones recíprocas que tienen lugar en intercambios biológicos, químicos, fisiológicos o sociales, entre otros. Esta idea de reciprocidad es importante para entender la interacción en el marco de la asignatura. En nuestro caso, podemos decir que se trata la interacción como una actividad o una acción de ida y vuelta entre un humano y un artefacto o sistema.
En cambio, la interactividad hace referencia a la cualidad de aquello interactivo. A pesar de que Janlert y Stolterman especifican que interactividad es un término que se puede usar en dos sentidos: como una palabra general por el fenómeno de la interacción o para referirse a la interacción como proceso. También se preguntan si la interactividad es una propiedad de la tecnología, un diseño o se encuentra en el uso que hacemos y mantienen que la interactividad es una propiedad objetiva, pero que las personas tienen diferentes maneras de enfrentarse a la interactividad.

Figura 14. Términos y definiciones
Fuente: elaboración propia.
Añaden el concepto de interactor como la persona que utiliza e interactúa con un sistema. Esta idea va más allá de la persona usuaria y es un intento de resituarla en el contexto específico de la interacción humano-máquina. Recuperaremos más adelante esta noción para ponerla en relación con las personas usuarias y el público en el contexto específico de la práctica artística.
Janlert y Stolterman también introducen el término interactibilidad, que hace referencia a la calidad intrínseca de un artefacto o sistema que permite interactuar. No es tanto el objeto interactivo ni tampoco el proceso de interacción, sino una potencialidad o una capacidad, con diferentes grados. Podemos considerar que el término interactibilidad conecta con la idea de agencia, es decir, en la agencia que un sistema interactivo promueve en las personas y que las mueve a actuar.